3.1. Higiene personal de los ancianos

 
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Las necesidades de cuidado y cuidado personal de cada persona variarán en función de su salud y movilidad en general. Es importante evaluar el nivel de ayuda requerido.

 
Dependiendo del estado de salud de la persona anciana y el grado de independencia, es importante ayudar a la persona mayor a realizar tareas de aseo por su cuenta, a estimular su actividad y no permitirle estar inactivo. En la medida de lo posible y el mayor tiempo posible, no hagas estas actividades por ella.
 
 
Tratamientos de higiene
 
El alcance de los tratamientos de cuidado e higiene para una persona mayor es el mismo que para otras personas. Las diferencias son el resultado de diferencias biológicas, psicológicas y sociales relacionadas con el proceso de envejecimiento.
 

Los tratamientos de higiene que garantizan la limpieza y la higiene personal incluyen:

   Lavado corporal (bañarse o ducharse o en el caso de que la persona tenga que estar acostada, lavar el cuerpo en la cama)
 
   Higiene oral
 
   Lavar y cepillar el cabello
 
   Cambio de ropa interior y ropa de cama
 
 
Todos estos tratamientos de higiene se pueden realizar utilizando diversas técnicas. Su elección depende de la condición física y de salud de la persona que estamos cuidando y del equipo que la apoya y asiste. Utilizaremos diferentes técnicas cuando una persona mayor puede moverse independientemente, y otra diferente en el caso de una persona dependiente acostada en la cama.
 
 
 
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