9.7. Hemorragia nasal

 
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El sangrado nasal es una aflicción común. A veces, puede ser síntoma de una enfermedad. El sangrado de la nariz se manifiesta por la fuga de sangre del sistema vascular.

 
La nariz se compone de músculos, cartílagos y partes de piel. Además, se divide en dos cavidades nasales, en las que hay una membrana mucosa que desempeña sus propias funciones. La temperatura del aire que entra en la nariz puede alcanzar hasta 32-34 grados, ya que la nariz está muy vascularizada. La sangre que circula a través de los vasos sanguíneos dilatados en la nariz actúa como una especie de radiador. El aire que entra en la cavidad nasal también se limpia, ya que cualquier impureza que se asiente a la entrada de la nariz se mueve hacia la garganta, gracias a los cilios y la saliva.
 

Puede haber varias causas para la hemorragia nasal:

   Hipertensión
 
   Enfermedades infecciosas con fiebre
 
   Manchas hemorrágicas congénitas (hemofilia y enfermedades relacionadas, trombocitopenia) o adquiridas (daños hemorrágicos, trombocitopenia adquiridas)
 
   Deformación del tabique nasal, lesión nasal
 
   Exposición excesiva a la luz solar o sobrecalentamiento del cuerpo
 
   Esfuerzo físico
 
   Aterosclerosis
 
   Otras afecciones (por ejemplo, cáncer, inflamación de la membrana mucosa, cuerpos extraños, etc.)
 
   Vascularidad nasal, que comienza en las arterias carótidas internas y externas
 

El procedimiento en caso de hemorragia nasal es el siguiente:

   Asegúrate de que la persona esté sentada con la cabeza ligeramente inclinada hacia adelante
 
   La persona de la que estás cuidando debe respirar con la boca
 
   Ponle un paño frío en el cuello y la frente, como una toalla empapada en agua fría o envuelta alrededor de cubos de hielo
 
   Ponle una gasa o un pañuelo en la nariz, exprime la fosas nasales sangrantes y mantenla apretada durante unos 10 minutos
 
   Si el sangrado nasal es grave y persiste después de estas operaciones (más de 15-20 minutos) o si ha habido una lesión en la cabeza o el cuello, o una perturbación en el conocimiento, llama a una ambulancia
 

¿Cómo prevenir hemorragias nasales?

   Mantén la mucosa nasal humedecida (especialmente durante el otoño y el invierno). Los humidificadores de aire se pueden utilizar para este propósito
 
   Evita hurgarse la nariz, ya que puede conducir a un micro trauma y sangrado
 
   Si la persona que cuidas está usando fármacos protectores de la mucosa, recuerda que no se aconseja utilizar este tipo de medicamento durante más de 5 días, ya que pueden interferir con el flujo adecuado y la purificación del aire en la nariz y dañar la mucosa. Es más seguro utilizar una solución isotónica de agua de mar, que hidrata suavemente las membranas mucosas y se puede utilizar durante períodos prolongados de tiempo.
 
   Todos los casos de hemorragia nasal (especialmente los intensos) deben consultarse con un médico.
 
   Registra las medidas de presión si la persona tiene problemas con la hipertensión, ya que aumenta el riesgo de hemorragia nasal
 
 
 
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